Enclavada en el corazón de los Valles Calchaquíes, en la provincia de Tucumán, se encuentra la Ciudad Perdida de los Quilmes, uno de los sitios arqueológicos más importantes y místicos de Argentina. Este antiguo asentamiento es testimonio de la resistencia y la cultura de la comunidad Quilmes, quienes enfrentaron la colonización española durante más de 130 años.
Un Viaje en el Tiempo
Las ruinas de la Ciudad Sagrada de los Quilmes se extienden sobre una superficie de 100 hectáreas al pie del cerro Alto del Rey. Este lugar no solo es una construcción arquitectónica, sino una fusión armoniosa con el paisaje natural, lo que muestra la habilidad de sus antiguos habitantes para adaptarse y coexistir con su entorno.
La Resistencia de los Quilmes
La comunidad Quilmes, una civilización indígena, se destacó por su férrea resistencia ante la conquista española. Durante más de un siglo, los Quilmes defendieron su territorio, manteniendo sus tradiciones y su cultura vivas a pesar de las adversidades. Finalmente, en 1667, fueron derrotados y forzados a marchar más de 1500 kilómetros hasta Buenos Aires, en un exilio que diezmó a la comunidad.
Explorando las Ruinas
Al visitar la Ciudad Perdida de los Quilmes, los visitantes pueden recorrer libremente el sitio arqueológico, explorando las terrazas, plazas y estructuras residenciales que aún se mantienen en pie. Caminar entre estas ruinas es como viajar al pasado, imaginando la vida cotidiana de los Quilmes, sus ritos y costumbres, todo resguardado por el paso del tiempo y la imponente presencia de los cerros circundantes.
Información Práctica
El acceso al sitio se realiza a través de la Ruta Nacional 40, y la entrada tiene un costo de $3500 (octubre 2024). Este precio incluye el acceso al centro de interpretación y a las ruinas, donde los visitantes reciben una introducción fundamental de una guía local.
Además, en el área hay locales de artesanías y opciones gastronómicas, donde se pueden adquirir productos típicos y disfrutar de la cocina regional.
Un Legado Vivo
Visitar las Ruinas de Quilmes es una experiencia que honra la historia de un pueblo que nunca se rindió. Es una oportunidad para mantener viva la memoria de una civilización que dejó una huella imborrable en la historia de Argentina.